Un sobreprotegido e inseguro adolescente de 14 ó 15 años prende un fósforo y juega un momento con el en sus manos, luego gira una a una las llaves de la cocina hasta lograr acertar y combinar fósforo con quemador para por fin calentar agua.
Cuando tiene dudas grita y pregunta o mas bien pregunta en voz alta hacia el dormitorio que esta cerca, en el primer piso. Desde ahí responde entrecortada una voz mayor, con mezcla de dureza y ternura…es difícil describir pero es SU voz.
Siguiendo el ejercicio de prender los quemadores, ahora es el turno para el tostador y una marraqueta torpemente tostada, quemada en los extremos y con la miga muy blanca al centro…
Después acomoda todo en una bandeja, la lleva a la voz del dormitorio del primer piso, ella lo recibe y le da un beso en la frente, como siempre lo hace y le da las gracias….
El adolescente inseguro luego se retira, tal vez a ver extra jóvenes, o tardes de cine o algo….(jamás a estudiar o a hacer tareas) mas tarde la casa se empieza a llenar de gente y como siempre todo pasa muy rápido, entonces esa voz con mezcla de dureza y ternura, SU voz, se va…se la llevan, ya nunca mas vuelve a oírla, ya nunca mas regresa, ya nunca mas….
Otra vez solo en la casa, tarde en la noche lo único que le queda por hacer es ir a su dormitorio, el de SU voz y buscar en algún indicio de que aquella once preparada en solitario ojalá de verdad le haya gustado, buscar indicios…
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario