Sueños Simplemente Sueños

observo desde algún lugar, como si estuviese viendo una película en 3D, pero desde el aire, algo así como ¾…

Veo a un sacerdote católico, conservador, usa sotana y sobre ella un alba y una estola verde, debe tener entre 40 a 50 años, pelo negro pero las sienes entrecanas.

Al mismo tiempo puedo sentir vívidamente las emociones del sacerdote, como si me pasaran a mi mismo. Este religioso está centrado en el poder terrenal, más que en el celestial, confía más en el poder de los hombres que en el poder divino.

Está llegando a la oficina parroquial, pero antes alguien le avisa que en el templo ha entrado un demonio y que este demonio ahora está en posesión del recinto, camina rápida y decididamente hacia la iglesia -no tengo claro como es este edificio por fuera- al entrar puedo ver que se trata de un lugar ovalado en donde los bancos están arrumbados hacia las puntas, por acción de las fuerzas del demonio, tiene ventanales grandes y alargados cubiertos por largas cortinas como un estilo de persianas de género, tiene además un segundo piso como un balcón que rodea a todo el espacio, en uno de los alfeizares del balcón el sacerdote puede ver una luz negra, me refiero a una de esas luces que no irradian que son como un punto que no brilla pero si ilumina focalizadamente el lugar donde esta, es una luz pequeña. No me doy cuenta cuando, pero la luz natural hace rato ya se ha ido, dejando todo en penumbras.

El sacerdote súbitamente comienza a sentir mucho miedo, terror, no cuestiona ni se acerca ni pregunta, asume que esa luz negra viene del demonio que está en el templo, siente miedo otra vez y solo como una fórmula vacía repite, levantando los brazos (como cuando a uno le dicen “manos arriba”):

“demonio te conmino a que abandones este templo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo”. Luego dice: “en el nombre de Jesús deja este lugar”, entonces los ventanales se abren o se quiebran (no estoy seguro de si es lo uno, lo otro o ambas cosas), las cortinas se levantan con un fuerte viento que además por lo vacío del templo resuena muy fuerte, de nuevo y sin mucha convicción repite:

“demonio te conmino a que abandones este templo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo”. Luego dice: “en el nombre de Jesús deja este lugar”, vuelve a ocurrir lo mismo, el miedo crece fuertemente en él y sigue repitiendo, varias veces,  mas como una fórmula que convencido realmente.

Sin embargo en un momento es tanto el miedo, que gradualmente comienza a aparecer en él verdadera fe en las palabras que repite, siento que abandona el poder terrenal y se va entregando verdaderamente a confiar en la fe en Dios y pese a que repite las palabras ahora éstas ya no son una fórmula vacía, ahora de verdad cree que el poder del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo lo acompañan y reconfortan, tiene temor pero este temor es mas pequeño que su fe y dice:

“demonio, te ordeno a que salgas de este templo, en el nombre de Jesús, vete”.

En ese momento el puede ver que la luz baja al primer piso, se acerca a la puerta, puede ver una silueta al abrirse la puerta del templo alguien que está parado, que por medio segundo lo observa, luego la luz se va, desaparece por la puerta del templo.

Ahora el sacerdote respira, como descansando y recuperando el aire, siente que su pecho está lleno de paz, eso mismo siento yo (en el sueño) y en el mismo instante, ahora ya fuera del mundo de los sueños suena la alarma, son las 7 a.m. del día de hoy, me despierto con frío, por primera vez en mucho tiempo tengo frío al despertar.